Al momento de cultivar tanto a pequeña como gran escala, es fundamental nutrir adecuadamente las plantas para que el proceso sea exitoso y no tenga complicaciones por falta de nutrientes. Cultivar es un proceso que a lo largo de la historia ha marcado la diferencia entre cosechas de alta calidad y otras que no lo son, y precisamente en la base de este proceso que garantiza una producción adecuada se encuentra el uso del abono. La tradición nos ha dicho que entre más natural más beneficios trae consigo, por eso en Labber te contamos qué es el abono orgánico y cómo debes usarlo.
La importancia de usar abono
La producción de frutas y hortalizas como el aguacate, el café y el plátano demandan altos estándares de calidad. Por tal motivo, en general la gran mayoría de la producción agraria necesita nutrientes adicionales para una buena cosecha. Mayores niveles de fósforo, nitrógeno y potasio facilitan un cultivo resistente a las enfermedades y que entrega un rendimiento adecuado.
Pero los beneficios del abono van más allá del crecimiento de los cultivos, pues el uso constante del suelo desgasta su composición favoreciendo la aridez. En ese sentido las ventajas del abono orgánico se traducen en beneficios durante varios ciclos de siembra y cosecha. Entre los más destacados se encuentran:
- Mayor cantidad de nutrientes
- Más carbono disponible
- Favorece la absorción del agua
- Permite reciclar desechos orgánicos
- Mejora la respiración natural de las plantas
- Combate la erosión
- Equilibra la acidez del terreno
¿Qué es el abono organico?
Al preguntar qué es el abono orgánico es común pensar en el compostaje. Sin embargo esta es solo una de sus posibilidades. El abono orgánico es una mezcla de elementos provenientes de la naturaleza que libera nutrientes en los suelos donde se aplica. En síntesis es uno de los métodos para fertilizar más comunes y prácticos que existen cuya principal ventaja es que no contiene químicos añadidos ni derivados del petróleo que pueden afectar los valores nutricionales de los vegetales y las frutas.
En términos generales, para tener claro qué es el abono orgánico debes saber que es un fertilizante que se obtiene a partir de materiales de origen vegetal o animal, es decir, puede incluir restos de plantas, estiércol, compostaje, entre otros. El abono orgánico se utiliza para mejorar la calidad del suelo y proporcionar nutrientes a las plantas de forma natural, y a diferencia de los fertilizantes químicos, se descompone lentamente en el suelo, lo cual proporciona nutrientes a las plantas de manera sostenible y aumenta la actividad biológica en el suelo.
Cómo se usa el abono orgánico en tus cultivos
El abono orgánico es una excelente opción para fertilizar tus cultivos de manera sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Utilizar abono orgánico no solo mejora la salud del suelo y de las plantas, sino que también contribuye a la sostenibilidad agrícola al reducir la dependencia de fertilizantes químicos. A continuación, te explicamos cómo usar el abono orgánico de manera efectiva en tus cultivos:
- Preparación del abono orgánico: antes de aplicar el abono orgánico, es importante asegurarse de que esté bien descompuesto y listo para su uso. El compost, por ejemplo, debe tener una textura suelta y un olor a tierra. El estiércol debe haber pasado por un proceso de compostaje para eliminar patógenos y semillas de malas hierbas.
- Aplicación del abono: el abono orgánico se puede aplicar de varias formas, dependiendo del tipo de cultivo y del estado del suelo. Una técnica común es la incorporación directa al suelo antes de la siembra. Otra técnica es el mulching, que consiste en aplicar una capa de abono orgánico en la superficie del suelo alrededor de las plantas para conservar la humedad y añadir nutrientes lentamente a medida que el abono se descompone.
- Dosificación: es importante aplicar la cantidad adecuada de abono orgánico para evitar problemas como el exceso de nutrientes, que puede ser tan perjudicial como la carencia de los mismos. La dosificación depende del tipo de abono y de las necesidades específicas del cultivo.
- Mantenimiento y seguimiento: después de aplicar el abono orgánico, es importante realizar un seguimiento del crecimiento y la salud de las plantas. Esto incluye monitorear la presencia de plagas y enfermedades, así como evaluar la efectividad del abono.
- Combinación con otros métodos de fertilización: En algunos casos, puede ser beneficioso combinar el abono orgánico con otros métodos de fertilización, como la fertilización foliar o la aplicación de abonos minerales. Esto puede ayudar a asegurar que las plantas reciban todos los nutrientes necesarios en las cantidades adecuadas.
Ventajas de usar abono orgánico
Con la información que te hemos dado hasta el momento, puedes deducir que el uso de abono orgánico supone ciertas ventajas comparado con el uso de fertilizantes químicos. Estas son las principales:
- Mejora la calidad del suelo: el abono orgánico ayuda a aumentar la materia orgánica en el suelo, haciéndolo más fértil y mejorándolo para retener agua y nutrientes. Además, ayuda a reducir la erosión.
- Proporciona nutrientes de manera natural: el abono orgánico contiene una variedad de nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas, como nitrógeno, fósforo y potasio, que se liberan de manera gradual en el suelo a medida que avanza el proceso de cultivo.
- Aumenta la actividad biológica en el suelo: el abono orgánico promueve el crecimiento de microorganismos que son beneficiosos en el suelo, como algunos tipos de bacterias y hongos, ayudando a mejorar notablemente la estructura del suelo y la salud de las plantas y cultivos.
- No tiene efectos negativos en el medioambiente: a diferencia de los fertilizantes químicos, el abono orgánico no tiene consecuencias negativas a nivel ambiental, ya que se descompone de manera natural y no contiene componentes químicos que son perjudiciales para el suelo y el aire.
- Promueve la agricultura sostenible: El uso de abono orgánico ayuda a reducir la dependencia de los fertilizantes químicos, promoviendo un enfoque sostenible en la agricultura y marcando la diferencia en los distintos tipos de cultivos.
Conoce aquí sobre los requerimientos para fertilizantes agrícolas.
Abono orgánico para la agricultura
Cuando hablamos de agricultura, hacemos referencia a la producción de plantas o frutos a gran escala. Por eso, después de conocer qué es abono orgánico, sabrás la importancia que tiene en la siembra de los cultivos. Sin embargo, hay que tener claridad que la utilización de abonos orgánicos se debe realizar de manera responsable y planificada de tal manera que las semillas y plantas puedan recibir los nutrientes necesarios para su crecimiento.
Es valioso saber reconocer que en una industria como la agricultura el uso de fertilizantes orgánicos caseros puede conllevar a reacciones adversas. Acá te queremos contar sobre esas consecuencias:
1 – Exceso de nutrientes
Aunque podríamos inferir que más es mejor, la realidad es que cuando un cultivo recibe un exceso de nutrientes, estos pueden impactar de manera negativa en su crecimiento. Es por esto, que cuando haces un abono casero aún sabiendo qué es abono orgánico, no tienes cómo medir la cantidad de nutrientes que estás aportando y por lo tanto la semilla o planta podría tener un exceso que le genere inconvenientes.
2 – Carencia de nutrientes
Así mismo, cuando proveemos a nuestro cultivo de fertilizantes naturales elaborados de forma casera, también estamos tomando el riesgo de que éstos no le proporcionen los nutrientes necesarios y esenciales para que este germine y crezca adecuadamente. De tal forma, es muy susceptible a enfermedades, alteraciones físicas, pérdida de rendimiento, entre otras.
3 – Atracción de plagas
Cuando hablamos de qué es abono orgánico para las plantas, inmediatamente podemos pensar en procesos artesanales como el compost, y una de las consecuencias que tiene el uso de este tipo de abono para cultivos es que puede atraer insectos u hongos que afectan el crecimiento y desarrollo de la planta; pues como sabemos, este tipo de plagas dañan los cultivos generando pérdidas económicas muy grandes.
4 – Dudosa calidad
La calidad de un abono orgánico casero está supeditada a un sinnúmero de factores climatológicos y externos que favorezcan la calidad de los nutrientes y la inocuidad de sus componentes para que sea efectivo para el cultivo. Y asegurar esto no es algo fácil, de tal manera que si la calidad es dudosa puede afectar el rendimiento de tu cosecha.
5 – Mayor inversión económica
Contar con las máquinas y equipos adecuados para la creación de lo que es un abono orgánico es infaltable, y para ello deberás realizar una gran inversión que garantice que este tipo de fertilizantes sostenibles sea adecuado para tu cultivo. Es así, como un abono hecho por ti mismo podría resultar incluso más costoso no solo a nivel económico, sino también en tiempo.
Importancia de los abonos para el campo
En la agricultura, el uso de abonos es importante para garantizar una producción de calidad y un rendimiento adecuado de los cultivos. Los abonos, tanto orgánicos como químicos, son esenciales para proporcionar los nutrientes que las plantas necesitan para crecer fuertes y saludables. La fertilización adecuada ayuda a mantener la salud del suelo, mejorar la calidad de los cultivos y aumentar la productividad.
El uso de abonos en el campo no solo beneficia a los cultivos, sino también al suelo. Los suelos agrícolas tienden a perder nutrientes con el tiempo debido a la explotación continua y a los procesos naturales de erosión y lixiviación. Los abonos ayudan a reponer estos nutrientes, asegurando que el suelo se mantenga fértil y productivo. Además, ciertos tipos de abonos, como los orgánicos, pueden mejorar la estructura del suelo, aumentar su capacidad para retener agua y fomentar la actividad biológica, lo que a su vez mejora la salud general de las plantas.
Abono orgánico mineral de Labber
Al hablar de abonos orgánicos es común tener presente materia en descomposición producto de hojas, cáscaras y heces de algunos animales. Si bien se trata de los abonos más conocidos no son los únicos existentes. Pensar en qué es el abono orgánico también debe incluir los minerales naturales.
El abono para cultivos de Labber toma como base los minerales extraídos de las canteras mineras y los pulveriza. Como resultado de este proceso se obtiene una distribución más proporcional de fósforo, nitrógeno y potasio que a través de las compostas, por ejemplo. Adicionalmente, impacta de forma más significativa y positiva los cultivos, porque aumenta la biodisponibilidad de los elementos en el suelo de forma constante.
Integración de abonos orgánicos
El campo de los abonos verdes, aquellos que buscan una fertilización sin los efectos adversos que generan los fertilizantes químicos, tiene un beneficio adicional. Tanto aquellos provenientes del proceso de descomposición como los minerales pueden mezclarse para potenciar sus efectos benéficos. Al entender qué es el abono orgánico es posible integrar ambos para lograr una fertilización sin el uso de químicos. De este modo, al mezclar el Agro Restaurador de suelos de Labber con materia orgánica como la gallinaza y el compostaje de hojas se nutre el cultivo con facilidad, obteniendo resultados exitosos.
Labber, abono orgánico de calidad
En Labber hemos entendido que los minerales provenientes de las rocas son un gran aliado para los cultivos. Su balance de elementos y el hecho de que no contiene añadidos que reduzcan su eficacia hacen que sea una excelente opción. Somos una de las empresas de fertilizantes en Colombia que más se ha comprometido con un cambio que lleve el campo a mejores prácticas que aumenten su productividad. Te invitamos a cotizar tu abono orgánico mineral con nosotros a través de nuestros canales de atención o nuestra línea de WhatsApp.